sábado, 14 de marzo de 2015

El running, la religión del siglo XXI.

Hace un par de semanas en una de las entradas del blog desarrolle un poco este tema y viendo que tuvo cierto eco entre la gente he pensado que sería interesante desarrollarlo un poco.

Antes de empezar quiero indicar que la entrada la escribo desde el respeto y sin ánimo de ofender a nadie. La entrada va a ser más una reflexión con cierta carga de humor y el intento de presentar de alguna forma las grandes similitudes que veo entre estos dos mundos tan dispares y tan separados el uno del otro.


Partiremos del punto del que la sociedad actual es una sociedad muy carente de creencias religiosas. A pesar de las profundas creencias católicas de la sociedad española, ya que 3 de 4 españolas se declara católico y el otro restante se declara ateo, solo un 10% de la sociedad española es practicante (1).

Así pues, ese vacío espiritual, esa carencia de ritos y rituales, tenía que ser ocupada por otro tipo de actividad, ya que el hombre desde que la humanidad tiene memoria histórica siempre hemos tenido ritos religiosos comunitarios. Y ese vacío ha sido ocupado por "El Running", que poco a poco se ha ido configurando como una gran religión con sus fieles, sus rituales, sus profetas, sus fiestas de guardar y sus sitios sagrados.

LOS FIELES

Como cualquier religión, "El Running" se fundamenta en sus fieles seguidores. Desde el comienzo del siglo XXI todos hemos visto como poco a poco los runners han ido aumentando sin prisa pero sin pausa, y este crecimiento ha sido exponencial en los últimos 5 años.

Hace tiempo la gente tenía un amigo que corría, pero aquello no era algo significativo, es más podía llegar a ser algo raro. Ahora ya todo el mundo tiene varios amigos que están metidos de lleno en mundo del running si no son ellos mismos los que han abrazado fervientemente esta nueva religión.

Y como buenos fieles, los runners van evangelizando por el mundo. Todos hablan de las bondades del running, de lo muncho que les ha cambiado la vida, de lo bien que se sienten e invitan todos sus amigos, familiares, conocidos, compañeros de trabajo e incluso desconocidos a que prueben, ya que una vez empiecen, no lo podrán dejar.

Es más, este afán de evangelizar llega a rozar la pesadez, ya que no hay momento en el que no estén hablando del running, independientemente de la situación y el momento, sobretodo en redes sociales, en las que con un profundo orgullo muestran con un bombardeo incesante sus entrenamientos, fotos y "grandes momentos" en su vida como corredores.

SUS RITUALES

Muchos son los rituales del running y muchos los caminos para practicarlo. Por un lado tenemos los rituales diarios e íntimos, que sería como el rezar cada noche o el bendecir la mesa antes de comer, en vez de esto, los runners entrenan.

Tenemos desde la rama más ortodoxa y radical del running con corredores que entrenan a diario no menos de 10 kilometros, con rutinas planificadas, cuestas, miles, fartleks, etc, pasando por corredores fieles pero sin caer en el fanatismo y que entrenan 2 o 3 veces entre semana y finalizando en los espontáneos que salen de vez en cuando sin fechas fijas.

Todos runners, todos amigos, pero todos colocados en una intrincada pirámide social en la que la dedicación, los resultados y la apariencia sitúan a cada corredor dentro del un complicado universo atlético.

Pero el ritual fundamental de esta religión, esa la "misa" dominical, es la tirada larga, la salida con los demás fieles. Solo hay que ir a un parque un domingo (o sábado) y ver a esos grupos más o menos grandes de corredores que salen a rodar juntos. Que luego estiran comentado la jugada y los entrenamientos de la semana, que luego quedan a tomar el aperitivo y que forman una comunidad de iguales que les hace sentirse bien y les da un sentido de pertenencia a algo grande superior a ellos mismos.

Incluso los que salimos a entrenar solos nos sentimos hermanos de aquellos corredores con los que nos cruzamos mientras corremos, les saludamos y de forma silenciosa renovamos y reforzamos un vinculo invisible que nos une. La paz sea contigo, hermano.

LOS PROFETAS

Curiosos personajes que cada vez proliferan con más fuerza. Corredores famosos, iconos de las redes sociales, entrenadores personales todos ellos venerados por los fieles de la congregación runner. Su palabra es ley y sus consejos palabras divinas que todos ven como infalibles.



Dan charlas a las que acuden nutridos grupos de corredores para aprender directamente de la fuente, la gente se fotografía con ellos y se enorgullece de haber estado tan cerca de la fuente de la sabiduría runner y las quedadas y entrenamientos guiados a los que acuden, se convierten en verdaderos eventos dentro de la comunidad.

También están las biblias o textos sagrados para los corredores, revistas y páginas webs del sector a las que continuamente los corredores recurren en busca de conocimiento y consejo. Que runner no es seguidor en redes sociales de 5 o 6 medios de comunicación especializados y un grupo aun mayor de atletas? Pues ninguno que se precie de ello.

LAS FIESTAS DE GUARDAR

O grandes momentos de la comunidad runner. Estamos hablando de las carreras y competiciones, momentos cruciales en la vida "religiosa" de todo corredor, organizadas en temporadas y en distancias, llegando al súmmum con las maratones.

Con estas fiestas pasa como con las fiestas religiosas en toda la geografía española, todas las comunidades autónomas tienen sus fechas concretas y pasa lo mismo hasta en los pueblos con sus propias carreras y eventos. A mayor importancia del pueblo, mayor distancia tiene la carrera y mayor número de corredores congrega, siendo para los corredores locales motivo de orgullo ser fieles a la fecha del evento que no se perderían por nada del mundo.

Y el culmen de estas muestras de fe, son los maratones, en los que la religión runner exhibe musculo llegando a congregar decenas de miles de fieles que festejan públicamente su amor incondicional al running con sacrificios extremos para los que se preparan durante meses.

SITIOS SAGRADOS


Al igual que la basílica de San Pedro, la Meca o Jerusalén, los runners también tienen sus sitios sagrados. Nueva York, Chicago, Boston, Londres o Berlín, son para los runners lugares míticos y sagrados a los que corredores de todas las partes del planeta peregrinan con devoción para poder formar parte por una vez en su vida de los grandes acontecimientos de esta nueva religión.

Por lo que podéis ver, la religión runner cuenta con todos los elementos básicos para ser considerada una nueva creencia que cada día gana más fieles y creyentes. Un movimiento que inspira fuertes convicciones, un profundo sentimiento de pertenencia y un camino para muchos de sus practicantes de crecer personal y espiritualmente.

Así que como he dicho antes, que la paz sea con vosotros hermanos y que en la tirada larga tengáis buen tiempo y que la brisa os sople favorablemente.

3 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.

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  2. Algún día tengo que escribir algo sobre las sectas del running. Los traileros, los minimalistas, los triatletas, etc. Jajaja

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