sábado, 21 de enero de 2012

El esfuerzo tiene recompensa

Hoy ha sido uno de esos días en que la naturaleza me ha recompensado generosamente por el esfuerzo de levantarme.

Ayer fue uno de esos días raros en los que sali a cenar con unos amigos y me termine liando hasta las 3 de la mañana. Una generosa cena regada con abundante cerveza y vino fue la entradilla para un festival de ron con coca cola que me dejo maltrecho y un poco mareado.

Creo que ese mareo fue lo que me impulso a ponerme el despertador a las 7:20 de la mañana para salir a correr, pero cuando ha sonado la alarma no me lo podia creer. Casi apago y me giro para seguir durmiendo, pero la costumbre y una fuerza de voluntad entrenada me han empujado a salir del catre y ponerme las pilas.

Un poco mareado he salido a la calle, pero el frio mañanaero me ha ayudado a centrarme y rapidamente me he puesto a correr muy suavecito. Aun era noche cerrada, pero era justo ese momento en el que una parte del cielo empieza a clarear creando un efecto en el cielo precioso.

A eso de las 8 y ya en la carretera de Colmenar sin ningun obstaculo me he regalado con los ojos con un espectacular amanecer en el que el cielo tenia todas las tonalidades del azul al rojo, con una nubes rosas que casi daban ganas de pararse y quedarse mirandolas.

Uno de esos días en los que te arrepientes de no correr con un movil con camara, ya que ese espectaculo dura muy poquito tiempo, justo hasta que sale el sol. Tal vez algún dia me lleve el movil y saque una foto, o tal vez no y me quede esos amaneceres solo para mi. ;)



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